viernes, 30 de enero de 2009

Símbolos de desprecio


En la ciudad natal de Sadam Hussein ha sido desvelada una estatua dedicada el hombre que mostró su desprecio por el expresidente George W., Bush arrojándole los zapatos. La nota publicada aquí dice así:

Many Iraqis considered it poetic justice when a journalist tossed his shoes at President George W. Bush last month. Now the bizarre attack has spawned a real life work of art. A sofa-sized statue of the shoe was unveiled Thursday in Tikrit, the hometown of the former Iraqi leader Saddam Hussein. Baghdad-based artist Laith al-Amari described the fiberglass-and-copper work as a tribute to the pride of the Iraqi people. The statue is inscribed with a poem honoring Muntadhar al-Zeidi, the Iraqi journalist who stunned the world when he whipped off his loafers and hurled them at Bush during a press conference on Dec. 14. In the Arab world, even showing someone the sole of a shoe is considered a sign of disrespect.

Sin duda, Bush se lo tenía bien merecido. En el fondo creo que es un buen tipo; desgraciadamente, como tuvimos ocasión de comprobar, la idiotez y la bondad no son cualidades humanas que se excluyan mutuamente.

martes, 27 de enero de 2009

No olvidar que la iglesia...


Un interesante libro que discute la relación entre ciencia y religión y, en particular, el modo como la religión ha hecho de las suyas entorpeciendo el camino de la ciencia, es el de B. Russell titulado Religión y ciencia, publicado desde hace algunos años por FCE. En este pequeño libro (175pp.) que lleva ya 14 reimpresiones (no confundir con reediciones), Russell nos muestra, entre otras cosas, las mil y una formas como esa santísima iglesia (ya saben cual), se encargó de declarar herejes a muchos hombres ilustres. De acuerdo con la reseña del libro publicada en la web del FCE, Russell "expone los principales conflictos en que, a través de la historia, se han visto envueltas la ciencia y la religión. Fruto de esas luchas ha sido la separación de los campos y hoy en no pocos espíritus religiosos se infiltra la idea de considerar a una y otra como dos maneras diferentes de comprender los problemas fundamentales del hombre".

Lo que mi memoria me permite recordar de ese libro es una cuestión fundamental que siempre hay que tener presente cuando discutimos estos temas: que toda religión se compone de un credo, una iglesia y un código moral. Parece obvio, pero llamo la atención sobre la distinción porque, generalmente, no solemos tener en cuenta que los dardos que se dirigen contra la religión pueden referirse a uno de esos elementos y no a todos, esto es, que podemos estar criticando a la institución y no al código moral, al credo o viceversa.